La ciudad
La ciudad respira, late, bebe y en algunas contadas ocasiones, también duerme.
Todos formamos a las ciudad a la vez que ella nos moldea, paseamos por sus calles, bebemos en sus bares, mientras ella guarda nuestros encuentros en sus esquinas, nuestros desamores en sus bancas y la memoria colectiva en sus paredes y sus edificios.
Señores, la ciudad es nuestra casa, el campo ha pasado a ser una imagen anecdótica de nuestros abuelos y de Rousseau. Nuestros poetas fuman sus cigarrillos en los cafés del centro de la ciudad y respiran el perfume de las musas de camión.
Es por ser la ciudad la confluencia de los deseos, frustraciones, vicios y expresiones de nosotros los hombre modernos, que creo necesario este intento de acercamiento a la urbe, con referentes particulares de focalización. Sentir la ciudad desde diversos ángulos, cual intento de visión poliédrica.
Las focalizaciones han surgido desde una experiencia subjetiva y sensorial, más que de un estudio de calidad académica.
Los temas sugeridos son los siguientes:
La ciudad y el tiempo
La ciudad y el cine
La ciudad y la euritmia
La ciudad y la ira
La ciudad y el vicio
La ciudad y el paisaje
La ciudad y la mierda
La ciudad y el espacio
La ciudad y el desarraigo
La ciudad y el arte
La ciudad y los gatos(a propósito de los tejados y por joder a Vargas Llosa)
La ciudad y lo viejo (la sacralización de lo antiguo)
La ciudad y lo nuevo (el culto a lo moderno)
La ciudad y las palomas
La ciudad y la soledad.
Por lo tanto, ésto no pretende ser un trabajo urbanístico, lo que procura es ser un acercamiento fenomenológico del fluir urbano. Queda abierta la lista por si alguien desea tomar un tema, proponer otro, continuar algún escrito o ignorarlos todos.
Vengan pues las vivencias urbanas, sus repercusiones sensoriales y sus múltiples focalizaciones expresivas.
Cid urbano
Todos formamos a las ciudad a la vez que ella nos moldea, paseamos por sus calles, bebemos en sus bares, mientras ella guarda nuestros encuentros en sus esquinas, nuestros desamores en sus bancas y la memoria colectiva en sus paredes y sus edificios.
Señores, la ciudad es nuestra casa, el campo ha pasado a ser una imagen anecdótica de nuestros abuelos y de Rousseau. Nuestros poetas fuman sus cigarrillos en los cafés del centro de la ciudad y respiran el perfume de las musas de camión.
Es por ser la ciudad la confluencia de los deseos, frustraciones, vicios y expresiones de nosotros los hombre modernos, que creo necesario este intento de acercamiento a la urbe, con referentes particulares de focalización. Sentir la ciudad desde diversos ángulos, cual intento de visión poliédrica.
Las focalizaciones han surgido desde una experiencia subjetiva y sensorial, más que de un estudio de calidad académica.
Los temas sugeridos son los siguientes:
La ciudad y el tiempo
La ciudad y el cine
La ciudad y la euritmia
La ciudad y la ira
La ciudad y el vicio
La ciudad y el paisaje
La ciudad y la mierda
La ciudad y el espacio
La ciudad y el desarraigo
La ciudad y el arte
La ciudad y los gatos(a propósito de los tejados y por joder a Vargas Llosa)
La ciudad y lo viejo (la sacralización de lo antiguo)
La ciudad y lo nuevo (el culto a lo moderno)
La ciudad y las palomas
La ciudad y la soledad.
Por lo tanto, ésto no pretende ser un trabajo urbanístico, lo que procura es ser un acercamiento fenomenológico del fluir urbano. Queda abierta la lista por si alguien desea tomar un tema, proponer otro, continuar algún escrito o ignorarlos todos.
Vengan pues las vivencias urbanas, sus repercusiones sensoriales y sus múltiples focalizaciones expresivas.
Cid urbano
3 comentarios
Jonathan -
Cambero -
Urbanómano, hijo bastardo de la modernidad, acepto tu invitación, condenado Cid.
Uc -